Por qué empresas exitosas fracasan

La arrogancia nacida del éxito

Muchos alguna vez nos hemos preguntado por qué empresas exitosas fracasan o han fracasado y precisamente la respuesta está en la arrogancia nacida del éxito. Hubo una vez, en mi ciudad natal, existía una cadena de supermercados tan grande que todos los habitantes compraban o habían comprado alguna vez allí, pero de un momento a otro empezaron a cerrar tiendas y al final desapareció. Jim Collins en su libro Empresas que caen habla sobre este aspecto que explica el fracaso nacido del éxito.

La arrogancia nacida del Éxito

En su libro, Jim Collins, Empresas que caen y por qué otras sobreviven, habla sobre el declive de grandes corporaciones y los errores que se cometen en la administración. Pero dice también que estas corporaciones cayeron no fue solo por malas decisiones, sino porque no entendieron su éxito.  Esto básicamente se refiere a la capacidad que tiene una empresa o una persona para entender las variables que lo llevaron al éxito y cómo pueden sostenerse sin volverse arrogantes. Solo basta con tomar un ejemplo, el de Motorola, la cual como una multinacional llegó a la cima vendiendo aparatos de comunicación, pero de un momento a otro fracasaron en el mercado de los celulares, porque no entendieron los cambios y las innovaciones en este campo y supusieron que su fama y su posicionamiento era suficiente.

Esto mismo nos sucede a nosotros como emprendedores y nuevos empresarios. Un negocio con arduo trabajo y dedicación será exitoso y en muchos casos el éxito es perjudicial, porque le da al empresario un sentimiento de tranquilidad, que le permite suponer que puede estar tranquilo, olvidando la clave de su éxito y cómo llegó ahí. Esto es arrogancia: suponer que siempre se va a tener éxito, sin importar nada más. Al llegar a este punto, el empresario se olvida de las ideas y el trabajo que lo llevo hasta ahí. Sin embargo, esto es el primer aspecto para el fracaso.

La arrogancia nos hace creer que todo está bien; que somos Súper héroes y que nadie nos puede quitar nuestro puesto. Se pierde por completo la humildad, olvidando por completo que los tiempos cambian y el mercado cambia. La arrogancia hace que se pierden clientes por mala atención y por desmejoramiento en los procesos. No se tiene en cuenta la innovación y se cree que lo que una vez funcionó, seguirá funcionando siempre. Entonces se deja de lado la innovación, las ideas y la capacidad de prevenir problemas.

Indicadores que muestran la arrogancia

La arrogancia se puede prevenir y se descubre con ciertos comportamiento y actitudes. Prevenirla, para mantener el éxito debe ser prioridad en el emprendedor. Te mostramos acá una serie de indicadores para prevenirla.

• ·       Se cree que todo está bien y no se necesita mejorar. Los empleados y los líderes de la empresa piensan que no hay nada mal y que todo funciona perfectamente.
• ·         Se cree que si las mismas acciones del pasado funcionaron, funcionarán siempre.
• ·         No hay innovación y todo se mantiene tal cual como antes.
• ·         No hay inversión
• ·         No hay estrategias de publicidad
• ·         Nadie quiere aprender
• ·         Se sustituye el trabajo arduo y la dedicación por la creencia de que la suerte siempre estará presente.

Habría muchos otros indicadores. Solo basta con sentirse de que el éxito del momento es la cima absoluta. Sin embargo, el éxito puede ser el primer motivo para llegar al fracaso.